Estudiar la carrera de farmacia nos proporciona un amplio abanico de posibilidades. Al final de la misma, podemos especializarnos en diversos campos. A continuación vamos a explicar con detalle uno de los más importantes en el campo industrial y en el de la sanidad : La química farmacéutica. Si hemos elegido estudiar farmacia, debemos conocer en profundidad esa parte de la química que es la química aplicada a la farmacia (química farmacéutica).
La química farmacéutica es una ciencia perteneciente al ámbito de ciencia farmacéutica y sus pilares más importantes son la química y la farmacología. El principal objeto de estudio de la química farmacéutica es la estructura y la forma de sintetizar compuestos químicos que poseen actividad biológica. Dichos compuestos suelen tener fines terapéuticos. Además de sintetizar nuevos fármacos, también se ocupa de analizar meticulosamente los ya existentes. Al estudiar farmacia, la química farmacéutica se convierte en una de las piezas clave a la hora de comprender correctamente la síntesis y composición de diversos fármacos. Las moléculas que se suelen estudiar en química farmacéutica son de origen orgánico, aunque también pueden estudiarse sustancias inorgánicas (muy importantes en farmacia).
En cuanto a las características de la ciencia farmacéutica, cabe destacar su relación con la química orgánica , la química-física, la bioquímica y la informática aplicada a la farmacia. Esta ciencia ha logrado diversos descubrimientos relacionados con las moléculas bioactivas de carácter farmacológico.
Si hablamos de la formación que debemos tener para especializarnos en química farmacéutica, debemos estudiar farmacia. Tras finalizar la carrera de farmacia, es imprescindible realizar un máster, y posteriormente un doctorado (química farmacéutica). Dicho doctorado suele impartirse en las facultades de farmacia y de química. La especialización en química farmacéutica, además de proporcionarnos numerosos conocimientos muy útiles acerca de los fármacos y su síntesis, nos abrirá numerosas posibilidades laborales.
En resumen, tras estudiar farmacia, una muy buena opción para incorporarnos al mundo industrial, es especializarnos en química farmacéutica.
