El tejido muscular cardíaco posee las siguientes características:
- El tejido muscular cardíaco está compuesto por células musculares que se encuentran ramificadas, y poseen varios núcleos que se unen entre sí por medio de la unión propia del tejido muscular cardíaco, la denominada disco intercalar.
- Las fibras musculares cardíacas, a diferencia de las esqueléticas, están unidas entre sí formando una disposición lineal.
- El núcleo de las células de este tejido se sitúa en el centro de las mismas, y presenta numerosas estrías en forma transversal, al igual que en el músculo esquelético.
- Se pueden apreciar numerosas mitocondrias, que se hayan distribuídas de manera regular, provocando la división de las células cardíacas en miofibrillas.
- Cabe destacar la presencia de gotas de lípido y partículas de glucógeno en el sarcoplasma.
- Las miofibrillas del tejido muscular cardíaco poseen la misma estructura que las del músculo esquelético.
- El tejido muscular cardíaco, así como el liso, se contrae de manera involuntaria. En el corazón están presentes unos potenciales de acción que provocan estas contracciones.
- Dichos potenciales de acción conectan con las fibras musculares del corazón por medio de conexiones eléctricas. La inervación simpática del corazón provoca un aceleramiento de la contracción, mientras que la inervación parasimpática ralentiza la contracción.
- Los músculos son capaces de transformar la energía química presente en el ATP en energía mecánica. En el músculo podemos apreciar filamentos finos, compuestos de troponina y actina), y filamentos gruesos, compuestos de miosina.