El estudiar farmacia les permitirá a los futuros graduados realizar funciones profesionales de gran variedad. Lo que la sociedad contempla como más visible es el ejercicio en oficinas de farmacia (conservación, asesoramiento, dispensación y elaboración de medicamentos), pero hay farmacéuticos que trabajan en el sector industrial farmacéutico, donde realizan funciones de investigación, producción, control de calidad, venta y marketing de fármacos, ejerciendo también como visitadores médicos. Igualmente ejercen su profesión en laboratorios de biomedicina, hospitalarios o independientes. Además, estos titulados actúan en campañas de salud pública e higiene, tanto en laboratorios especializados, como en organismos sociales que supervisan la salubridad de los suministros alimentarios y establecimientos públicos diversos.
Así pues con una visión panorámica sobre el grado en farmacia, estos titulados trabajan en sectores farmacéuticos, biosanitarios, hospitalarios, cosméticos, químicos y alimentarios. También en campañas de salud pública, asi como en la producción y control de calidad de productos sanitarios. En todos estos sectores, los farmacéuticos contribuyen desde una amplia diversidad de perfiles profesionales, a la salud de la sociedad a la que sirven. El alumno que elija estudiar farmacia debe de tener interés por la ciencia, sobre todo por las ciencias experimentales relacionadas con la farmacia. Debe tener capacidad de trabajo, atención y concentración, capacidad de análisis y síntesis, razonamiento lógico, rigor y atención al detalle, sensibilidad por los problemas sociales y por la atención hacia los demás.